George Michael, nacido Georgios Kyriacos Panayiotou en junio de 1963 en Londres, se convirtió en una de las figuras más emblemáticas del pop británico. Hijo de un chipriota y una bailarina inglesa, su crianza estuvo marcada por la fusión de culturas. Desde joven, mostró un talento innato por la música, formando el grupo Wham! junto a su amigo Andrew Ridgeley. Con éxitos como “Wake Me Up Earlier than You Go-Go” y “Final Christmas”, el dúo alcanzó la fama internacional en los años 80.
Sin embargo, el éxito tuvo un precio. Problemas contractuales con su disquera y la lucha por su libertad creativa llevaron a la disolución de Wham! en 1986. George se lanzó como solista, lanzando el exitoso álbum “Religion”, que lo consolidó como un gran compositor. A pesar de su éxito, enfrentó desafíos personales, incluidos problemas de adicción y la pérdida de seres queridos.
George Michael falleció el 25 de diciembre de 2016, dejando un legado musical monumental y un impacto duradero en la cultura pop. Su activismo por causas sociales, especialmente en la lucha contra el SIDA, también marcó su vida. Su música sigue siendo un referente, recordándonos que el verdadero talento perdura más allá de la fama.